lunes, 14 de octubre de 2013

Mochileros recorriendo América


El arte de recorrer el mundo con una mochila tienen sus secretos y cuestiones que sólo un mochilero experimentado puede saber. En esta nota, dos mochileros argentinos nos cuentan cómo recorrieron América en un reportaje que revela muchas cosas que te pueden ayudar a programar tu propio viaje, conociendo de antemano los problemas con los que te puedes encontrar, los preparativos del viaje y el itinerario con los mejores destinos de este maravilloso continente. 





El reportaje a Pablo Ditaranto, uno de los dos mochileros que han recorrido América. 

- ¿Qué viajes han hecho?

Te comento... cuando nos iniciamos en esto de mochileros, nuestro primer viaje fue al sur de la Argentina. Se podría decir que uno de los típicos viajes dentro de nuestro país. En esa oportunidad realizamos el circuito de los 7 lagos, conociendo Junin, Bariloche, San Martín de los Andes, Villa La Angostura, el Bolsón y Esquel, entre muchas otras ciudades y pueblos.

Luego, otro viaje muy interesante dentro de Argentina fue el de la zona de la Patagonia donde recorrimos los glaciares de Calafate yel Chalten , un lugar interesantísimo para realizar treking. En Chile visitamos Punta Arenas, Puerto Natales yTorres del Paine, donde volvimos a cruzar hacia la Argentina para terminar en Ushuahia. Fue un hermoso y muy recomendable viaje.

Despues de varios viajes a esta hermosa zona del sur argentino, yo particularmente (Pablo) tuve la posibilidad de hacer el ascenso al monte Aconcagua, sin haber llegado a la cima de la montaña, pero aún así habiendo llegado a mi cima. Una experiencia limite.

Otro de los viajes imposibles de olvidar fue nuestra primer salida al norte argentino. Allí estuvimos en Tucumán y en sus ciudades de San Miguel, Tafi Viejo, Tafi del Valle, Amaicha y las ruinas de Quilmes. En la provincia de Salta visitamos Cafayate, San Carlos, Los Molinos, Cachi, Salta, Iruya y San Isidro, y en la provincia de Jujuy, recorrimos San Salvador, El Volcán, Purmamarca, Maimara, Tilcara, Humahuaca, Abra Pampa y La Quiaca.

En el mismo viaje fuimos a Bolivia, a Uyuni y su grandioso salar, Tupiza, Tarija y Potosi. En nuestro siguiente viaje al norte, además de todo lo hecho en el anterior, seguimos recorriendo Bolivia. Conocimos Uyuni, Potosi, Oruro, La Paz, Coroico, Sorata y Copacabana. En la zona peruana fuimos a Puno, Cusco, las ruinas de Machu Picchu y obviamente todos los alrededores de Cusco, Arequipa (la ciudad blanca), Molliendo, Camana, Nazca y sus lineas y Tacna. Al pasar al lado chileno estuvimos en Arica, desierto de Atacama y la capital, Santiago.

No puedo dejar de mencionar nuestro viaje relámpago a Colombia, conociendo Bogotá, Cartagena de Indias, Santa Marta, Isla de la Providencia, Isla del Rosario, Isla de San Andrés y demas cayos perdidos por el mar caribe. 

- ¿Cuál disfrutaron más? 

Buena pregunta… difícil de contestar. Uno siempre dice que lo mejor de estos viajes es la unión del grupo. Casi siempre viajamos en grupo con el Tano (Andrés Ditaranto), su esposa (Mariana), amigos de amigos que siempre se pueden juntar y quien les escribe. Es maravilloso ver cómo cada uno tiene opiniones diferentes a lo largo del viaje. Cada uno se maravilla de manera distinta al llegar a cada pueblo, ciudad, ruinas, museos…

Pero creo que lo más interesante de estos viajes es el hecho de conocer nuevas culturas, con sus costumbres, idiomas y dialectos. Tratar de compartilos y aprender de ellos sin contaminarlos. Realmente debo decir que algunos de los momentos más maravillosos de los viajes fue la primera vez que pude ver Machu Picchu. El llegar a Potosi, el ver la cumbre del Aconcagua a pasitos míos, sin dejar de mencionar al imponente glaciar Perito Moreno, en Argentina. 

- ¿Tuvieron problemas para cruzar las fronteras? 


En absoluto. Sí hemos tenido muchos controles, arduos controles en el ingreso a Chile- El único inconveniente que tuvimos (cosa que sabíamos de antemano que íbamos a tener) fue que un integrante del grupo no pudo ingresar a Perú desde Bolivia por tener el pasaporte argentino. Aunque en su poder tenia un salvo-conducto del consulado peruano en Buenos Aires, se lo rechazaron, teniendo como única posibilidad la estadía en Bolivia y vuelta a la Argentina. Pero más allá de estos inconvenientes, fue muy bueno el paso de fronteras. 

- ¿Algún consejo para los que quieren viajar de mochileros y no se animan?

¿Por qué no animarse? ¿Acaso por el hecho de la inseguridad? ¿De no tener grupo? ¿De no querer viajar solo? Viajar de mochilero es una de las maneras más hermosas para viajar. Uno va con su mochila cargada en su espalda, recorriendo destinos increíbles, conociendo gente increíble.


Qué más lindo que estar en una ciudad o pueblo donde uno no conoce a nadie. Y en el fogón, en la cocina del hostel, caminando por las calles… conocer a otros que están en la misma situación que uno. ¡Mejor todavía si son extranjeros! Seguir conociendo distintas costumbres, distintas maneras de conocer, distintas maneras de viajar. Están los que viajan en bus, los que lo hacen a dedo (autostop), los que buscan del viaje un desafío permanente, los que viajan sin tener nada planeado. Hay miles de maneras de viajar de mochilero. Particularmente pienso que lo mejor es probar e ir eligiendo sobre la marcha. Tener un itinerario para no perder tiempo pero no atarse completamente a eso. 

Saber que uno nunca va a estar solo porque siempre va a haber gente para ayudarte, sino para qué estamos nosotros. La comunidad de mochileros, con más de 1600 personas que queremos ayudarnos entre todos.

Anímense a viajar y si es de mochileros mejor. El ser mochilero no obliga a uno a viajar a dedo, haciendo que todo se haga lo más económico posible. Mucha gente confunde a mochilero con economizar todo. Yo creo que el viajar de mochilero es una manera más de viajar. Esto no nos obliga a hacerlo sí o sí a dedo (lo cual les digo, es una hermosa experiencia). Por ser mochilero no se está más expuesto a que le pasen cosas que a un turista “normal”. Es más, nunca nos ha pasado nada de nada. Ni siquiera nos han robado... y miren que hemos estado por zonas marginales. Anímense. 

- ¿Qué preparativos y precauciones realizaron antes de iniciar los viajes? 

En mis primeros viajes trataba de tener todo solucionado antes de iniciarlo y eso cansa mucho. Creo que lo más importante es tener toda la documentación al día, averiguar en el caso de ir a otro país qué documentos serán necesarios para el ingreso y salida del mismo. Tambien está la parte de vacunación. Nada mejor que hablar con alguien especializado sobre la medicina del viajero. Hay lugares donde uno no sabe qué enfermedades hay. Siempre hay que estar vacunado ante todo, es una manera de viajar más seguro.

¿Preparativos? El hecho de armar la mochila, se da con la experiencia. Siempre va a estar la duda de cuánto llevar. Todo depende de adonde se vaya, la época del año, cantidad de días... Siempre que uno prepara las cosas tiende a llevar de más y eso puede ser muy molesto a lo largo del viaje. Nunca hay que llevar cosas de más, por lo menos no muchas. En la web tenemos algunos listados de cosas esenciales para llevar, pero también depende de cada uno. 

En cuanto al itinerario de un viaje ¿qué decir? Es muy bueno averiguar bastante antes de iniciar un viaje, pero también es muy interesante el factor sorpresa, sin estar atado de pies a manos a un itinerario. Uno a veces tiene la posibilidad de unirse a otro grupo en medio de un viaje, o por lo menos por un trayecto... y es acá donde el viaje comienza a tomar otro color. Como mencioné antes, conocer gente nueva, aprender a viajar con gente que realmente nunca has visto es todo un desafio.

- ¿Cuál será su próximo viaje? 

Hace mucho tiempo tengo ganas de hacerlo. La idea principal es recorrer toda Latinoamerica, desde México hasta la Argentina por tierra por un largo tiempo, por lo menos unos 4 meses. Iniciando el viaje en Cuba, cruzando a México, luego Guatemala, El Salvador, Nicaragua, Costa Rica, Panamá, Colombia, Venezuela, volver a Colombia, Ecuador, Perú, Bolivia y Argentina.


Se preguntarán por qué viviendo en la Argentina hago el viaje de norte a sur. Sencilla razon (y acá es donde es bueno averiguar bien antes de iniciar un viaje)...la primer inteción era hacer el viaje de sur a norte, pero luego de ir a todos los consulados y respectivas embajadas, además de charlar con otros mochileros, es prácticamente imposible acceder a Panamá desde Colombia si no se tiene un pasaje aéreo de vuelta al país de origen, cosa imposible de hacerlo si uno quiere unir todo por tierra. Averiguando un poco más, parece ser que desde Panamá sí se puede cruzar a Colombia. Es por eso que queremos iniciar el viaje de norte a sur, además de querer asegurarme de conocer Cuba, México y Guatemala. 

Este es el viaje más cercano a realizar, pero para más adelante está la idea de poder conocer China, la India y Africa. Todo a su tiempo… 

- ¿Qué expectativas tienen para este viaje? 

Expectativas, creo que las mejores. Mejor dicho... sin dudas las mejores. Sí, como dije anteriormente, este es un viaje pensado dehace mucho tiempo. En un primer momento estaría viajando solo hasta Cuba para encontrarme con dos españoles y con un italiamo más en México, todos miembros de Mochileros. Pero a lo mejor, el Tano tenga posibilidades de poder hacer parte del itinerario, sea en Cuba, México o en la zona de Venezuela. ¡Ojalá se dé!



Y para los futuros viajes... todas las ganas de poder realizarlo en un tiempo no muy lejano. 




¿Quien no ha soñado alguna vez con dejar todo y lanzarse a vivir las rutas y sendas del mundo, conocer las culturas y gentes de cada sitio y país, e incluso parar y vivir un tiempo en sitios de ensueño? Seguramente todo viajero anhela hacer un gran viaje, sea como mochilero o viajando en buses, y aquí comenzaremos con nuevas notas realizadas a mochileros y viajeros haciendo hoy esas rutas mágicas. Conócelos y descubre la forma de hacerlo tu también.



- ¿Qué viajes han hecho? 

-Manolo: Mucho Argentina, mucho Chile, casi todo Perú, mucho de Bolivia, pizca de Brasil, coqueteo paraguayo y toda la costa Uruguaya. 



- Nelson: Si, hemos hecho la ruta Sudamérica Austral como nuestra primera experiencia de viajes independientes por el mundo. 
Conocer Sudamérica es fascinante, pero también más difícil y extenso que dar una vuelta por Europa. Nos pareció lo más sensato conocer primero nuestro continente, luego de haber explorado todo el Perú. 

- ¿Cuál disfrutaron más? 

- Nelson: Me es muy difícil saber cuál más. De hecho, todos los viajes están de algún modo pensados para disfrutar al máximo. En todo caso los viajes que tienen más contratiempos como robos, pérdidas, averías de equipos, retrasos de buses, y enfermedades son los que se quedan un poco por detrás de los otros. 
Creo que lo mejor estuvo en la Patagonia argentina y chilena, así como en los andes peruanos. Particularmente me gusta mucho el misticismo oculto en el desierto del sur peruano. 



- Manolo: El conjunto, los contrastes y similitudes. Nuestro recorrido por Sudamérica Austral fue un todo. Las personas hacen los países, hay que disfrutarlas, conocerlas y llevarse lo mejor. Si tengo que hablar de lugares, prefiero recomendar las bellezas poco conocidas. El Chaltén en Patagonia Argentina y Choquequirao en Cusco, Perú. 

- ¿Tuvieron problemas para cruzar las fronteras? 

- Manolo: Muy pocos. Al inicio siempre hay desconfianza en los controles, por el hecho de tener el pasaporte vacío. Una vez sellado y sellado, tu documento es como una hoja de vida y las puertas se abren con mucha más facilidad. 

- Nelson: En general ninguno ya que cruzamos muchas fronteras. Sin embargo entrando a Chile se notó un evidente recelo por permitirnos cruzar. Nos dijeron que no nos iban a permitir pasar (¿mintiendo para esperar que confesáramos algo?) y alegando que nuestros motivos para cruzar podrían ser falsos. En Brasil nos faltó la vacuna, pero como ya llevábamos varios meses fuera de nuestro país y era de madrugada nos dijeron algo en portugués que no entendimos que de seguro significaba "pasen". 

- ¿Algún consejo para los que quieren viajar de mochileros y no se animan? 

- Manolo: Salgan a andar. El temor existe cuando no se conoce, la realidad es mucho más amigable de lo que uno a veces piensa. Nuestras fronteras son muchas veces mentales. Para iniciar camino es recomendable lo de uno, primero el país, de ahí será más fácil salir al mundo. 



- Nelson: Tener un poco de valentía para hacer un viaje independiente puede ahorrarles muchísimos euros y darles la flexibilidad que necesitan para conocer lo que quieran. El mundo es como un gran menú a la carta. 
Esencial es buscar información, mapas, y alimentarse un poco de las experiencias de otros viajeros. 

- ¿Qué preparativos y precauciones realizaron antes de iniciar los viajes? 



- Nelson: Buscamos toda la información e hicimos contactos previos con amigos en cada país. Creamos una sección para nuestro diario en mochileros.org de modo que sea de fácil actualización mientras íbamos conociendo. Imprimimos nuestros propios mapas, sacamos tarjetas de crédito (son más seguras que efectivo), compramos mochilas, vimos películas inspiradoras y websites (Diarios de Motocicleta, Long Way Round), seleccionamos lo esencial para el camino, nos despedimos de los amigos.... y partimos. 

- ¿Cuál será su próximo viaje? 

- Manolo: Aún lo estamos definiendo. Latinoamérica norte nos espera, aunque nuestro hermoso sur aún esconde innumerables belleza para mostranos. 

- Nelson: Es cierto. Queremos llegar ahora al norte de Sudamérica hasta donde nuestra planificación y el respaldo que recibamos nos lo permita... 
Sin embargo Sudamérica Austral ha dejado una huella profunda y varias intrigas que nos gustaría descubrir. Estamos midiendo las opciones. 

- ¿Qué expectativas tienen para este viaje? 

- Nelson: A diferencia del anterior, me gustaría tener la oportunidad de estar más tiempo en cada ciudad y conocer más el lado humano de cada país. De ser posible conocer familias en la ruta que va desde Perú hasta Canadá (o hasta donde lleguemos). Y seguir inspirando a más viajeros a disfrutar de la inigualable experiencia de conocer más el mundo. 




- Manolo: Muchas, si es Latinoamérica norte, hacerla mejor, aprovechar la experiencia de Sudamérica Austral para planificar mejor la travesía.